top of page

Guardemos nuestra actitud

No os descuidéis en ningún momento de guardar una actitud digna. Suponed que pasáis por el lado de un niño presas de cólera y blasfemando. Vosotros no habéis visto al niño, pero él os ha vista a vosotros, y es muy probable que conserve el recuerto de vuestra baja actitud. Sin saberlo habréis sembrado un mal germen en el alma de ese niño, un germen que puede desarrollarse, y todo por haber cometido un olvido ante ese muchacho, por no haber cultivado en vuestro ser el amor activo, hijo de la reflexión.

2 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

https://www.youtube.com/live/Z18kLhhNTwc?si=Cz4GGLqjcAt81-mt

https://www.youtube.com/live/qs1bWeTW25A?feature=share

bottom of page