DIA 7 — La mentalidad “enfocada en el problema”
Hoy estamos ayunando de lo que yo llamo la mentalidad “enfocada en el problema”. La mentalidad enfocada en el problema simplemente ve y reporta el problema.
VAMOS A CAMBIARLO HOY
1. Nunca te conformes con soloreconocer un problema. Hay bastantes críticos y quejosos en el mundo. El mundo necesita personas de ideas con soluciones, no sólo aquellos que reportan un problema.
2. Somos compensados en la vida por los problemas que resolvemos, no los problemas que solo recon- ocemos. En Génesis 41, José no sólo reconoció la hambruna que venía, sino que ofreció una solución para la hambruna. Como resultado, se convirtió en el hombre más poderoso del mundo. Incluso el Faraón inclinó su corazón a José y reconoció su poder.
3. ¡Ama las matemáticas! ¿A qué me ref iero? La matemática es una gran disciplina porque prueba que hay una solución para cada problema. Si te gustó o no la matemática en la escuela, tenemos que reconocer esto: Hay una solución para todo. Búscala.
4. Tú tienes la mente de Cristo.Con Su mente, tú encontrarás Sus soluciones. Para cada problema que el hombre ha creado, Dios tiene una solución ¡Y tú tienes Su mente!
5. Apóyate en el Espíritu Santo.Según somos guiados por el Espíritu Santo y oramos en el Espíritu Santo, traemos Sus soluciones a nuestra situación. Romanos 8: 26-27 dice: “(…) el Espíritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad; porque no sabemos orar como debiéramos, pero el Espíritu Santo mismo intercede por nosotros (…) conforme a la voluntad [soluciones] de Dios”.
6. Deja de hablar del problema ycomienza a hablarle al problema. Jesús dijo: “Si dijereis a este monte, quítate y échate al mar y no dudas (…) te obedecerá”. Usa tu boca para mover el problema.
PIÉNSALO Y DILO
Yo creo que Dios me dará las interpretaciones a los problemas de la vida y que Él me bendecirá con sabiduría y respuestas. Creo que hay una solución para cada problema, porque tengo la mente de Cristo. Doy la bienvenida al Espíritu Santo para orar a través de mí y traer la voluntad y las soluciones de Dios a mi vida y la vida de aquellos que me rodean, ¡en el nombre de Jesús!